sábado, 24 de mayo de 2008

Speed Racer, el LSD en estado visual

La ultima película de los Wachowski, es un claro homenaje, tributo a una de las series que disfrutaron de crios, esas series japonesas que entraron tímidamente con Mazinguer Z, Ulises 31, Comando G y la que nos ocupa, Meteoro o en la versión anglo, Speed Racer.

Los hermanitos cambiaron la forma del cine con su trilogía de Matriz, guste o no guste, esta trilogía creo escuela, filmando como nunca se habían hecho, revolucionando el cine de acción para siempre.

Lo han querido volver ha hacer con el genero familiar (si es que hay tal genero), tal vez no lo han logrado, y no se vuelva ha ver una película como Speed Racer en mucho tiempo, pero lo que no se puede decir es que no solo lo han intentado, sino que han conseguido otra vez romper con lo establecido, se han dejado llevar sin ponerse limites, han hecho de una historia lineal y sin pretensiones, una película que técnicamente esta por encima de su tiempo, ya no solo por los efectos especiales, sino por los planos novedosos que usan, las formas de narrar la historia, el como nos intercalan flash backs con una sutileza aplastante y como vuelven a jugar con la acción y las peleas como quieren.

No será una película de oscar, y será una película incomprendida y señalada como ridícula, pero creo que la valentía de hacer un producto de esta manufactura es una prueba de genialidad que hay que defender, por que lo han vuelto hacer, han vuelto a revolucionar la formas de filmar y hacer una película, la cuestión es que tal vez no se de cuenta la gente de esto hasta que pase mucho tiempo.

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